México, 8 nov (EFE).- El presidente de México, Enrique Peña Nieto, inauguró hoy formalmente la interconexión de la autopista elevada de la Ciudad de México con la caseta de peaje a Cuernavaca, que requirió una inversión de 133 millones de dólares para aliviar la salida de la capital hacia esa urbe.
Esta vía de siete kilómetros de largo y que funciona desde el pasado 27 de octubre moderniza “la conectividad de la capital del país y de su zona metropolitana”, destacó.
Peña Nieto indicó que durante su mandato (2012-2018) se han destinado importantes recursos para el desarrollo de infraestructura en el país, con 28 de 52 proyectos ya terminados.
“No ha habido inversión en los últimos años tan importante como la que se ha realizado (en la capital del país) y se proyecta realizar de aquí al cierre de la Administración”, apuntó.
El mandatario señaló que más de 35.000 millones de pesos (unos 1.881 millones de dólares) están destinados a nuevas vialidades para “aliviar de manera importante el tráfico” en la capital mexicana.
La culminación de obras como la autopista La Marquesa-Toluca y la de Chalco-Cuautla y las ampliaciones de la de México-Pachuca y México-Puebla, además de este viaducto elevado que llega a la caseta de Tlalpan.
El jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, reconoció que esta obra de infraestructura ha sido un “fruto sustancial” de la coordinación que existe entre su Administración y el Gobierno federal para cumplir un viejo reclamo de los ciudadanos.
“Esta obra era un reclamo de hace mucho tiempo de la Ciudad de México, la demanda era permanente, los trayectos se alargaban sustancialmente (por el tráfico) y era un reclamo constante de la ciudadanía”, apuntó.